Erigida en lo alto de una formación rocosa en el paisaje del occidente de México, la Casa La Roca se integra en armonía con la naturaleza agreste del paisaje y las vistas dilatadas de gran profundidad, diseñada por el estudio mexicano RRZ Arquitectos.
La concepción del proyecto fue el de crear una casa dominante, que se viera suspendida de lo más alto de la gran roca, que pareciese como si la casa flotara sobre la montaña. El terreno se fundamenta en una formación rocosa de más de 100 metros de ancho y 30 metros de altura, dominando la vista del valle y las montañas de los alrededores, con la construcción de dos niveles, con un tercer nivel suspendido sobre una gran columna en forma de muro. De esta manera el gran volumen que se apoya en la roca desde un extremo, por el otro, da la impresión de desaparecer al caer la tarde, gracias a ese muro-columna forrado de cristal oscuro.
La casa cuenta con una fachada horizontal de más de 90 metros de longitud, que tiene la orientación óptima, para favorecer el confort climático interior y las mejores vistas para todo el proyecto. La distribución de la casa contiene un núcleo central donde están las áreas comunes y de servicio, el garaje, la cocina, el comedor, estancia y sala de tv. En un ala están las recámaras, cada una con terrazas y estupendas vistas, un nivel abajo se encuentran las áreas sociales, la terraza con alberca y un gran jardín, diseñándolas en el lugar privilegiado de la vista panorámica.
Otro de los aspectos por los que se destaca la Casa La Roca es por su amigabilidad con la naturaleza. Cuenta con una fachada acristalada que, junto a su orientación, permite aprovechar al máximo la luz y el calor, para proporcionar un sistema de calefacción natural. Además de disponer de un mecanismo de reciclaje del agua, paneles solares y una completa instalación domótica.
Casa la Roca es un proyecto cuidado, con rigor, hasta el último detalle en el que los acabados, los colores y su arquitectura han sido cuidadosamente tratados para conseguir, que la casa se integre con su entorno plenamente, que enfatiza con rigor, la dicotomía de artificio y naturaleza, propia de las grandes obras de arquitectura.