El estado original del inmueble, posterior a que dejara de ser el Cine Colonial por casi medio Siglo, era el de un inmueble que denotaba los espacios que lo definieron para las proyecciones cinematográficas, con los cambios de tecnologías que sucedieron, el espacio del predio sólo contaba con el portal de cantera que daba a la plaza y la primera crujía de pilastras rectangulares también de cantera que nos conectaban con las glorias pasadas del antiguo cine, en estilo colonial del Siglo XVIII.
En la conceptualización del nuevo proyecto se tomaron en cuenta sólo estos fragmentos del portal de la plaza a esta primera crujía, para tratarlo y respetarlo como patrimonio artístico y poder diseñar con libertad todos los espacios del teatro para cubrir el complejo programa de un proyecto multifuncional de artes contemporáneas.